Charles Bukowski
poemas.ar
La ducha - Charlos Bukowski
Traducción: Griselda García
nos gusta ducharnos después
(a mí me gusta el agua más caliente que a ella)
y su rostro está siempre suave y calmo
y ella me lava primero a mí
me pasa jabón por los huevos
los levanta
los aprieta
después me lava la pija:
"ey, ¡esta cosa todavía está dura!"
después, todo el pelo ahí abajo,
la panza, la espalda, el cuello, las piernas
yo sonrío, sonrío, sonrío
y después la lavo a ella
primero la concha, yo
me pongo atrás de ella, mi pija en los cachetes de su culo
con suavidad le enjabono los pelos de la concha
le lavo ahí con movimientos suaves
quizás me demoro más de lo necesario
después detrás de las piernas, el culo
la espalda, el cuello, la doy vuelta, la beso
le enjabono los pechos y la panza, el cuello
las piernas por delante, los tobillos, los pies
y después la concha, una vez más, para la suerte
otro beso, y ella sale primero
se seca, a veces canta mientras yo me quedo adentro
pongo el agua más caliente
siento los buenos tiempos del milagro amoroso
después salgo
por lo general es media tarde y todo está tranquilo
y mientras nos vestimos hablamos sobre qué más
podríamos hacer
pero el estar juntos lo resuelve todo
porque mientras eso esté resuelto
en la historia de una mujer y
un hombre, es diferente para cada uno
para mí es tan espléndido como para traer
los recuerdos del dolor y la derrota y la desdicha:
cuando te lo lleves
hacelo lenta y suavemente
hacelo como si me estuviera muriendo en sueños en lugar de en
vida, amén.
(a mí me gusta el agua más caliente que a ella)
y su rostro está siempre suave y calmo
y ella me lava primero a mí
me pasa jabón por los huevos
los levanta
los aprieta
después me lava la pija:
"ey, ¡esta cosa todavía está dura!"
después, todo el pelo ahí abajo,
la panza, la espalda, el cuello, las piernas
yo sonrío, sonrío, sonrío
y después la lavo a ella
primero la concha, yo
me pongo atrás de ella, mi pija en los cachetes de su culo
con suavidad le enjabono los pelos de la concha
le lavo ahí con movimientos suaves
quizás me demoro más de lo necesario
después detrás de las piernas, el culo
la espalda, el cuello, la doy vuelta, la beso
le enjabono los pechos y la panza, el cuello
las piernas por delante, los tobillos, los pies
y después la concha, una vez más, para la suerte
otro beso, y ella sale primero
se seca, a veces canta mientras yo me quedo adentro
pongo el agua más caliente
siento los buenos tiempos del milagro amoroso
después salgo
por lo general es media tarde y todo está tranquilo
y mientras nos vestimos hablamos sobre qué más
podríamos hacer
pero el estar juntos lo resuelve todo
porque mientras eso esté resuelto
en la historia de una mujer y
un hombre, es diferente para cada uno
para mí es tan espléndido como para traer
los recuerdos del dolor y la derrota y la desdicha:
cuando te lo lleves
hacelo lenta y suavemente
hacelo como si me estuviera muriendo en sueños en lugar de en
vida, amén.