Raquel Adler
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Mil y un beso - Raquel Adler
Tú me dijiste, la mirada en fuego,
Te daré mil y un beso en cada mano.
Se extendía tu alma como un ruego
Al pétalo ahuecado de mi mano.
Tu angustia en un arranque sobrehumano
Templó el acero del deseo al fuego
Del terciopelo de mis dedos. Vano
No fue el tormento de tu alama en ruego.
Seda de tu deseo; sed de aliento;
Vida que brota y que en mi vida siento;
Susurro de tus ansias que se exhalan.
Mil y una noches esplendorosas, ellas;
Y mil y un beso que inquietos resbalan
En mis manos, mil nidos y querellas.