Michel Houellebecq

poemas.ar

Una vida de nada -  Michel Houellebecq

Yo ya me sentí viejo al poco de nacer;

Los demás luchaban, deseaban, suspiraban;

En mí no sentía más que una añoranza imprecisa.

Nunca tuve nada parecido a una infancia.

En la profundidad de ciertos bosques, sobre una alfombra de musgo,

Repugnantes troncos de árbol sobreviven a su follaje;

En torno a ellos se forma una atmósfera de luto;

En su piel ennegrecida y sucia medran los hongos.

Yo no serví jamás a nada ni a nadie;

Lástima. Vives mal cuando es para ti mismo.

El menor movimiento constituye un problema,

Te sientes desgraciado y, sin embargo, importante.

Te mueves vagamente, como un bicho minúsculo.

Ya apenas eres nada, pero, ¡qué mal lo pasas!

Llevas contigo una especie de abismo

Mezquino y portátil, levemente ridículo.

Dejas de ver la muerte como algo funesto;

De vez en cuando ríes; sobre todo al principio;

Intentas vanamente adoptar el desprecio.

Luego, lo aceptas todo, y la muerte hace el resto.

  



Utilizamos cookies para permitir un correcto funcionamiento y seguro en nuestra página web, y para ofrecer la mejor experiencia posible al usuario.

Configuración avanzada

Puedes personalizar tus preferencias de cookies aquí. Habilita o deshabilita las siguientes categorías y guarda tu selección.

Las cookies esenciales son imprescindibles para que la página y el sistema de registro funcionen de forma correcta y segura.
Las cookies funcionales recuerdan tus preferencias para nuestra web y permiten su personalización.
Las cookies de rendimiento regulan el comportamiento de nuestra página web.
Las cookies de marketing nos permiten medir y analizar el rendimiento de nuestra página web.